¡Alerta en Atlanta! Falsas Amenazas de Bombas y Ataques en Hospitales
La ciudad de Atlanta y sus alrededores vivieron momentos de tensión el viernes por la noche debido a una serie de amenazas de bomba y llamadas falsas sobre ataques en varios hospitales. Tanto la policía de Atlanta como la de Sandy Springs respondieron a las alarmas, pero afortunadamente, no se encontraron amenazas reales.
Falsas Alarmas en Hospitales Emory
La policía de Atlanta investigó informes sobre una posible amenaza de bomba en dos sedes del Hospital Emory: Emory University Hospital (1364 Clifton Road) y Emory University Hospital Midtown (550 Peachtree Street). Tras una exhaustiva revisión, los oficiales confirmaron que ambas llamadas eran infundadas. "Los oficiales no localizaron ninguna amenaza creíble en ninguna de las ubicaciones. Ambas llamadas parecen haber sido infundadas", informó la APD.
El Hospital Emory emitió un comunicado asegurando que, tras la investigación de su propio departamento de policía y la APD, se dio el "visto bueno". "Las principales prioridades de Emory Healthcare son la seguridad y el bienestar de sus pacientes, visitantes y personal", se lee en el comunicado.
"Swatting" en Northside Hospital
Mientras la policía de Atlanta investigaba las falsas amenazas en los hospitales Emory, la policía de Sandy Springs recibió una llamada de "swatting" alrededor de las 8:15 p.m. sobre un "atacante activo" en el Northside Hospital. Los oficiales de Sandy Springs respondieron de inmediato y revisaron el hospital, confirmando que la llamada era falsa. También se dio el visto bueno en Northside.
Amenaza de Bomba en Children’s Healthcare of Atlanta
Otro incidente similar ocurrió en el Children’s Healthcare of Atlanta - Hughes Spalding hospital el miércoles, cuando se recibió una amenaza de bomba alrededor de las 11:30 a.m. La policía de Atlanta realizó una búsqueda completa en el hospital y dio el visto bueno poco después de la 1 p.m.
Las autoridades continúan investigando estos incidentes para identificar a los responsables de estas falsas alarmas que generan pánico y consumen recursos valiosos de la policía y los hospitales.