Tensión Nuclear: Irán Avanza y EE.UU. Busca Acuerdo Urgente
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La tensión en torno al programa nuclear iraní se intensifica. Mientras Irán continúa enriqueciendo uranio a niveles peligrosamente cercanos al grado necesario para armas nucleares, Estados Unidos busca desesperadamente un nuevo acuerdo que ponga freno a estas actividades.
EE.UU. Apura un Nuevo Acuerdo Nuclear con Irán
Según fuentes, el equipo de Donald Trump ha presentado un borrador de “principios” para un nuevo acuerdo nuclear con Teherán, utilizando al sultán de Omán como intermediario. El objetivo principal de EE.UU. es claro: detener el enriquecimiento de uranio por parte de Irán en su propio territorio. La propuesta incluye la creación de un consorcio nuclear regional, involucrando a Irán, Arabia Saudita y otros países árabes, con la participación de EE.UU., para suministrar combustible nuclear bajo supervisión occidental.
La Postura de Irán: Soberanía y Líneas Rojas
Irán, por su parte, insiste en su derecho soberano a enriquecer uranio con fines civiles. Consideran que dar marcha atrás en este aspecto sería cruzar una “línea roja” inaceptable. La filtración de la AIEA (Organismo Internacional de Energía Atómica) confirmando que Irán almacena uranio enriquecido entre el 50% y 60% añade aún más urgencia a la situación.
El Peligro del 60% de Enriquecimiento
El enriquecimiento al 60% es alarmante porque el salto al 90%, necesario para armas nucleares, es mucho más rápido. Irán ya posee una cantidad considerable de uranio enriquecido al 60%, lo que reduce drásticamente el tiempo necesario para obtener material fisible para una bomba. La AIEA ha expresado su “grave preocupación” por esta situación.
Israel y la Amenaza Existencial
Benjamin Netanyahu considera una bomba iraní una amenaza existencial para Israel. Ha instado a Trump a tomar medidas inmediatas, incluso explorando una acción conjunta. Israel ha demostrado en el pasado su disposición a atacar instalaciones nucleares en países vecinos, lo que aumenta la incertidumbre y el riesgo de escalada.
La situación sigue siendo extremadamente volátil, con Estados Unidos buscando una solución diplomática urgente y Irán desafiando las restricciones internacionales. El futuro del acuerdo nuclear y la estabilidad regional penden de un hilo.